Una dieta equilibrada y rica en nutrientes es importante para nuestra salud, porque mejora la capacidad del organismo para luchar contra las bacterias. Por lo tanto, comer sano también ayuda a proteger las encías de infecciones y los dientes de caries. En el Día Nacional de la Nutrición, que se celebra el 28 de mayo, la odontóloga de Sermade Andreina Mendoza nos ayuda a entender la importante relación que existe entre la alimentación y la salud oral.
“Si nuestra dieta carece de ciertos nutrientes, puede ser más difícil que los tejidos de la boca resistan una infección. Esto puede contribuir a la aparición de una enfermedad en las encías, que puede convertirse en una de las principales causas de pérdida dental en los adultos”, explica la experta. De hecho, estudios demuestran que la enfermedad periodontal avanza de forma más rápida y es potencialmente más grave en personas con una mala alimentación.
Alimentos que dañan nuestra boca
- Dulces: no tienen valor nutricional y contienen azúcar que puede adherirse a nuestros dientes y provocar la aparición de caries.
- Cuidado con los aperitivos, como las patatas fritas, porque contienen mucho almidón que tiende a fijarse en los dientes y contribuir a la aparición de placa dental.
- La acidez de los tomates y las frutas cítricas, como naranjas o limones, pueden puede perjudicar al esmalte de los dientes. Son sanos y nutritivos, pero mejor tomarlos como parte de una comida.
- Los alimentos pegajosos, como las frutas deshidratadas, se adhieren a los dientes. Reduce su consumo y evita el consumo de caramelos o chicles. También hay que tener cuidado con los alimentos duros, porque pueden romper o astillar los dientes.
- El café y el té manchan, así que cepíllate los dientes tras tomarlo o reduce su consumo.
- El alcohol deshidrata y seca la boca, lo que puede reducir la saliva y fomentar la aparición de caries e infecciones.
- Evita las bebidas azucaradas y carbonatadas, porque contienen ácidos que atacan el esmalte de los dientes produciendo caries.
Alimentos beneficiosos
- La leche y los productos lácteos aportan calcio, que ayuda a regenerar el esmalte dental.
- Los alimentos ricos en proteínas, como la carne, el pescado, la leche y los huevos, contienen fósforo, muy beneficioso también para el esmalte.
- Las frutas y verduras, como manzana, zanahoria, pimiento y apio, equilibran los azúcares y ayudan a limpiar los dientes, porque estimulan la producción de saliva.
- Alimentos con fibra, porque requieren un mayor esfuerzo de masticación y promueven la generación de saliva, lo que ayuda a eliminar los restos de comida o ácido adherido a los dientes.
Qué y cuándo comer
La odontóloga de Sermade recuerda que para tener una dieta equilibrada hay que realizar varias comidas a lo largo del día. Además, debemos escoger alimentos de cada uno de los grandes grupos: cereales, frutas, vegetales, carnes, pescados, leche y productos lácteos.
Por otra parte, subraya que debemos procurar evitar picar entre comidas. “Cada vez que ingerimos un alimento que contiene azúcares o almidones, los dientes son atacados por ácidos durante 20 minutos o más”, apunta. Si fuera necesario comer entre horas, la experta recomienda que sean comidas nutritivas como queso, vegetales crudos, yogur sin azúcar o fruta.
Por tanto, además de cuidar lo que comemos, debemos que tener en cuenta cuándo lo comemos. “El tipo de alimento que consumamos, el momento en el que lo hagamos y la frecuencia también influirá en la salud de nuestra boca”, detalla Mendoza.
En definitiva, los alimentos que ingerimos a las horas de las comidas causan menos daño, porque segregamos más saliva, lo que ayuda a un mejor lavado de boca y a disminuir el efecto de los ácidos.
La importancia de la higiene
La placa dental causante de la caries es, básicamente, una fina capa de gérmenes que se alimentan del azúcar y el almidón que se encuentran en muchos alimentos. “Si la higiene bucal no es la adecuada, se producen ácidos que pueden destruir el esmalte dental, que es la superficie dura de los dientes y, después de un tiempo, se puede producir la caries dental”, advierte la odontóloga.
Por consiguiente, para mantener la boca en perfecto estado, Mendoza aconseja cepillarse tres veces al día con una pasta rica en flúor y utilizar hilo dental o cepillos interdentales. Además de visitar al dentista, como mínimo, cada seis meses para prevenir y, en el caso de que surja algún problema, siempre será más fácil de tratar al haberlo detectado de manera precoz.